El camino hacia la nebulización del marketing
Según Aristóteles, existía un quinto elemento, además de la tierra, el agua, el aire y el fuego, que conformaba los cielos y planetas. Se trataba del éter: la quintaesencia, el espíritu casi divino que configuraba todo lo que estaba por encima de la tierra. Algo difícil de explicar pero omnipresente. De hecho, con frecuencia utilizamos …